Conoce cómo el polvo y la humedad oxida las patas metálicas de tus muebles y aprende a cuidarlas para que siempre estén ¡cómo nuevas!
El problema del polvo y la humedad
Siempre pensamos que el polvo solo está en las calles, cuando un auto pasa de manera rápida o que el día está húmedo cuando hay neblina, la temperatura está baja y hace algo de frío. Sin embargo, en nuestro diario vivir, siempre existen estos dos componentes que son los causantes de que el metal que hay en las patas de tus muebles tenga una apariencia de vejez y mal cuidado: el polvo y la humedad.
Este disolvente universal, como es llamado, y que es necesario para nuestra supervivencia, es usado también en los hogares para la limpieza de los pisos, tanto, que lo combinamos con otros productos químicos para humedecer traperos, escobas y paños; y que, al momento de usarlos tocamos las patas de los muebles causándole deterioro en corto tiempo.
Pero mantener las patas metálicas de tus muebles relucientes no tiene por qué ser una tarea difícil. Con una limpieza regular, materiales adecuados y técnicas efectivas para eliminar el óxido, tus muebles pueden lucir siempre como nuevos. Veamos qué puedes hacer.
1. Evita mojar las patas de los muebles
Al momento de realizar aseo en tu hogar, evita que el trapero mojado entre en contacto con las patas de los muebles, ya que la humedad que arroja genera que vayan tomando un color naranja y luego se forme una marca rojiza o color marrón de muy mal aspecto, dando la sensación de descuido.
2. Protege los muebles
Si lavas el piso de tu casa con mangueras o cualquier recipiente que lance agua, protege los muebles, cúbrelos o colócalos en otro sitio. Así evitarás, salpicar las patas y que por ende su material se deteriore, que se produzca una textura gruesa en la corteza del metal cromado.
3. Usa un trapo seco
No limpies las patas con trapos húmedos, lo mejor es hacerlo con uno seco. Recuerda que el agua no es compatible con el metal, que es el principal componente de las patas.
4. Cuidado con los sprays
Debido a los componentes químicos que tienen, te sugerimos tener mucho cuidado cuando apliques spray contra los insectos. Procura utilizarlos lejos de las patas de tus muebles. Los spray contienen: glicerol, perfume fantasía, etanol, alcanfor, propelentes, entre otros químicos disolventes que pueden deteriorar el material de las patas.
5. Evita el contacto con las patas de tus muebles
Si tienes una visita en casa y por accidente alguien derrama algún líquido sobre un sofá, evita que el producto con el que estás limpiando el daño entre en contacto con las patas de tus muebles.
6. Actúa a tiempo
SI las patas entran en contacto con el agua o la humedad, sécalas inmediatamente, no dejes que se escurran solas, así evitarás que tu mueble se termine malogrando y adquiriendo ese horrible aspecto. Si no actúas a tiempo puede terminar en corrosión, que es el deterioro de un objeto de metal, ocasionado por una reacción electroquímica que normalmente llamamos oxidación.
¿Qué más puedes hacer para proteger tus muebles?

Sé contante con la limpieza

Ten cuidado al barrer
Al barrer en la casa, el polvo se deposita en muchos lugares de nuestros muebles, sobre todo en las patas. Por eso, es vital que tengas cuidado al realizar esta actividad y limpiarlas de inmediato o colocar unos protectores mientras barres.
Aplica un producto especializado
Si deseas que la pata se vea reluciente, puedes aplicar cremas para brillo de metales, son muy fáciles de encontrar en ferreterías y en almacenes que vendan productos para el hogar. Esto debe aplicarse también con un paño blanco y seco, las veces que consideres necesario.
Crea una rutina de limpieza

Recuerda que la durabilidad de tu mueble depende del excelente uso y cuidado que tengas, además de tener muy presente las recomendaciones que te hemos dado.
Limpieza y protección por tipo de mueble
Queremos darte algunos tips extras acerca de qué hacer para que los demás elementos de tu hogar estén siempre limpios y libres de la humedad y el polvo.
Sofás
Los sofás requieren un mantenimiento regular para evitar la acumulación de polvo y humedad:
- Sofás de tela: Aspira el sofá al menos una vez por semana para eliminar el polvo y los ácaros. Utiliza un limpiador de telas y evite exponer el mueble a la humedad excesiva.
- Sofás de cuero: Pasa un paño seco o ligeramente húmedo con agua destilada y aplica un acondicionador para cuero cada seis meses para evitar el resecamiento y la formación de grietas.
- Consejo extra: Mantén el sofá alejado de fuentes de calor y de la luz solar directa para prevenir el desgaste prematuro.
Camas y colchones
Los colchones y las estructuras de cama pueden acumular ácaros y hongos si no se limpian adecuadamente:
- Colchones: Aspira el colchón mensualmente y utiliza protectores impermeables para evitar que la humedad penetre en su interior.
- Estructuras de cama: Si son de madera, usa un paño seco y un limpiador especial para madera. En caso de que sean metálicas, opta por un paño húmedo con agua y jabón suave para eliminar la suciedad.
- Consejo extra: Ventila el colchón regularmente y colócalo al sol para eliminar la humedad acumulada.
Comedores y mesas de centro
Las mesas y sillas de comedor pueden verse afectadas por manchas, polvo y humedad:
- Mesas de madera: Usa un paño seco o ligeramente húmedo para limpiar la superficie y aplica cera para madera cada cierto tiempo.
- Mesas de vidrio: Aplica una mezcla de agua con vinagre blanco y seca con un paño de microfibra para evitar marcas de agua.
- Sillas tapizadas: Aspira regularmente y usa un limpiador de telas en caso de manchas.
- Consejo extra: Evita colocar objetos calientes directamente sobre las mesas y usa posavasos para prevenir daños en la superficie.
Juegos de sala
Los muebles de la sala suelen estar expuestos a polvo constante y humedad ambiental:
- Muebles de madera: Aplica aceite o cera especial para evitar que la humedad afecte la estructura.
- Muebles tapizados: Aspira frecuentemente y utiliza un spray antiácaros para evitar alergias.
- Consejo extra: Usa cortinas o persianas para reducir la exposición a la luz solar, lo que puede causar decoloración en los muebles.
Espejos
Los espejos pueden empañarse y acumular polvo, afectando su claridad:
- Limpieza efectiva: Mezcla agua y vinagre o limpiacristales y un paño sin pelusa para evitar rayones.
- Prevención de humedad: Coloca deshumidificadores en espacios cerrados y bien ventilados.
- Consejo extra: Evita tocar el espejo con las manos para reducir la aparición de manchas.
Alfombras
Las alfombras acumulan grandes cantidades de polvo y humedad si no se mantienen adecuadamente:
- Aspirado frecuente: Aspira al menos dos veces por semana.
- Limpieza profunda: Utiliza un limpiador a vapor cada seis meses para eliminar ácaros y bacterias.
- Consejo extra: Sacude la alfombra al aire libre y exponla al sol de vez en cuando.
Bibliotecas y estanterías
Las bibliotecas y estanterías suelen atraer polvo con facilidad:
- Limpieza regular: Limpia con un paño seco o ligeramente húmedo para limpiar las superficies.
- Evitar humedad: No coloques libros en zonas húmedas y coloca bolsitas de sílice para absorber la humedad.
- Consejo extra: Organiza los libros de manera que haya espacio para la circulación de aire, evitando la acumulación de humedad en su interior.